Si bien es cierto que durante los primeros años de vida republicana, las mujeres eran poseedoras de una libertad total para poder ejercer casi sin ninguna restricción diversos roles, incluso políticos. Con el transcurso de los años estos 'privilegios' desaparecerían.
Así pues, ya en la década del 70 (del XIX) las mujeres eran y debían ser vistas como madres de familia y poseedora de valores, que se encarguen de la educación de los hijos. Aunque en una primera instancia, esta nueva perspectiva de la mujer hiciera parecer que perdieran un rol protagónico en la sociedad; no ocurrió esto. Por el contrario, con sus aportes (en esos tiempos) en la prensa y en la opinión pública, la mujer se torno influyente en la vida intelectual de la aún pequeña ciudad limeña.
Estandarte y símbolo de esta revolución fue La Bella Limeña, semanario dirigido para las familias. Este semanario tenían el propósito de ofrecer entretenimiento, cultura y de elevar el nivel moral de la familia. Aunque la existencia del periódico fue breve (apenas de once números, que van desde el 7 de abril al 16 de junio de 1872) la influencia de la mujer intelectual fue relevante. En realidad, La Bella Limeña surgió y se elevó a partir de los grandes ideales occidentales, prueba de ello es la manera en que llamaban a sus lectoras: ninfas de las aguas del río Rímac.
La composición de este semanario que salía todos los domingos era la siguiente: página editorial, crónica de la semana, histora, literatura (novela, cuento, tradición, poesía, traducción), modas, moral y costumbre, geografía, higiene, miscelánea y de anuncios domésticos. Toda la informacion presentada en el semanario era compartida y realizada, tanto por hombres como por mujeres. La lista de mujeres participantes de La Bella Limeña era sustancial y tenía como privilegio, el periódico, tener entre sus filas a ya entonces una intelectual de renombre, Juana Manuela Gorriti. Publicaciones de novelas, poemas, ensayos y diversas expresiones literarias estuvieron a cargo de las intelectuales de la época.
Bibliografía empleada:
CASTAÑEDA, Esther y TOGUCHI, Elizabeth. Las románticas en un semanario del siglo XIX.