jueves, 25 de noviembre de 2010

Artículo social: Una fiesta de salón

Portada del sábado 4 de mayo de 1839

En el año 1839 fue celebrado el gran baile de salón del general La Fuente, luego de haber salido victorioso en la batalla de Yungay, la cual acabaría con la Confederación Boliviana. La fiesta, además, conmemoraba a la Virgen de las Mercedes, patrona del ejército peruano.

En este siglo los medios escritos eran abundantes, aunque muchos de ellos sin calidad alguna, es en este contexto que aparecería 'El Comercio', periódico que aportaria mucho a nuestras letras. En él su publicarían novelas, críticas, notas y artículos sociales y políticos. En esta oportunidad detallaremos íntegramente un artículo que cubre la fiesta antes mencionada.

Las personas y aun partes de las clases, que figuraban antes de 1820, es lo único que ha cambiado en la escena política y social; pero las mismas fiestas han quedado, la misma disposición de divertirse frente a las jentes.

A las 9 estaban poblados todos los salones de las personas de ambos sexos, vestidos con elegancia, y ya alternaban las vistosas contradanzas nacionales, con la alegre y rápida valza alemana. Notamos entre los personajes, de distincón (y toda la reunión merecía calificarse de este modo) al señor jeneral del ejército Restaurador con su estado mayor, y a los jefes de la división del mismo ejército, los señores encargados de negocio, británicos y chilenos, el comandante de la fragata de S. M. B. ''Presidente'' con algunos de su oficiales, el cónsul jeneral del Ecuador, los señores jenerales Raigada y Salazar, el señor Alvarez de la Corte Suprema, el coronel Ugarteche, los señores Mendiburu,... Nada diremos de las damas, sus atractivos y galas: cada una de ellas merecerían nombrarlas y elojiarse en un artículo separado.

A las contradanzas sucedieron las contradanzas interpoladas con cuadrillas y bailes aislados, todo con el mejor orden y decoro, hasta la hora de la cena... La luz de la mañana se mezclaba ya con la luz artificial de las arañas y las lámparas, y en nada había disminuido la alegría y buena disposición de los concurrentes: solamente a la sonora orquesta militar y al piano del salón, había sucedido la guitarra con el tamborilero popular que hace danzar a los más graves, y que retuvo a casi toda la concurrencia hacia las 7 de la mañana.

Por nuestra parte preferiremos siempre las (fiestas) que parezcan siempre a la del Sr. Jeneral La Fuente, por el buen humor y franqueza, unidos con el más perfecto decoro y cortesia entre los convidados. (El Comercio, 2 de octubre de 1839)
Espero que el breve artículo haya servido para mostrarnos cómo se celebraban las fiestas aristocráticas de esos años. Así como para conocer la forma de escribir en un periódico de la época.
Si les parece bien y les ha agradado esta entrada, seguíré colocando de vez en cuando algunas notas sobre eventos que acontecían en Lima. Se sorprenderán con todo lo que existía en esos años.
Bibliografía empleada:
DEL ÁGUILA, Alicia. Los velos y las pieles. Lima: IEP, 2003.

8 comentarios:

  1. Muy interesante. Se ve que los restauradores celebraron a los grande.

    Saludos.

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  2. Hola querido César, por supuesto que me agrada. Todo lo que se refiera a sucesos en años pasados, me atrae enormemente.
    Lo curioso del relatar de la noticia, con que modales era expuesta. Supongo tal como se exigía en aquella época.
    Ya me imagino, un salón inmenso, lleno de hombres y mujeres, con todas sus galas, haciendo algunos sus corrillos, supongo que los hombres estaban separados de las mujeres a la hora de hablar después de la cena y antes del baile. No sé eeee

    Me ha gustado, si.

    Que tengas un buen día (para mi ya es noche jeje) .. Besitos azules muassssssssss

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  3. Cesar, por lo que a mi respecta disfruto mucho con estas entradas en las que relatas las crónicas de esa época de la historia.
    Me hubiese podido asistir a uno de esos bailes, suenan tan divertidos y elegantes.
    Muy interesante.
    Besos.

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  4. Hola querido Cesar,
    lo primero de todo comentarte que ayer publiqué una cita del conocido Yerovi Douat, conocido poeta peruano, ya he leído tu comentario me alegra que te haya gustado. Sobra decir que ha sido un placer y que no es la primera vez que cuento con Peruanos famosos entre mis citas, Cesar Vallejo, Chocano... Hoy mismo he publicado un poema de un colombiano poco conocido y que a mi me encanta, Manuel Acuña, espero te guste también.

    Con respecto a la entrada de hoy, me parece interesantísima, siempre me han maravillado esos bailes de salón tan fastuosos y sin duda las hemerotecas son algo importantisimo como fuente de información histórica. El comercio, muy bueno si señor.

    Gracias compañero por estos recortes de historia que tan generosamente nos muestras.

    Saludos cordiales y cuídate.

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  5. Saludos profesor. En torno a las victorias de los Restauradores y sus celebraciones es conocida sus grandes festejos. Usted lo sabe mejor que yo.

    Hasta pronto.

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  6. Hola Kanet, gracias por tu visto bueno. Espero que te agraden también algunas crónicas que presentaré en algún tiempo de, como tú llamas, años pasados =).

    Tu comentario sobre la fiesta y su descripción es perfecta, pues es de esa manera que se daba, sí,, claro que sí. ¿No habrás asistido a una de esas fiestas, acaso?

    Que estés bien, hasta pronto.

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  7. Hola Wendy, veo que ha tenido buena acogida la publicación de esta entrada, gracias.

    A mí me parece que hubieras sido una invitada de honor en estas fiestas, mostrarías todo tu conocimiento sobre la época y tus modales resaltarían, aunque sin perder la diversión como dices. Por lo pronto, solo nos queda imaginar los tiempos pasados...

    Hasta pronto, buen fin de semana.

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  8. Saludos Princesa! Cada día me sorprende más tu conocimiento profundo de la poesía en español. En el tiempo que conozco tu blog no he visto citas de Chocano o Vallejo, de seguro fueron mencionados antes de descubrir tu espacio.

    A mí me agrada mucho tu blog, me parece bastante original y sobre todo de rápida lectura, siempre tus citas dan pie a comentarios profundos.

    Y sí, las hemerotecas son fundamentales para descubrir relatos como éste, que transitan entre lo histórico y lo literario.

    Gracias por tu visitas y cuídate también

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